Descrifrando el EMIR REFIT: una visión general
A medida que el Programa de Adecuación Regulatoria (REFIT) de la Regulación de Infraestructuras del Mercado Europeo (EMIR) se acerca a su fecha de entrada en vigor el 29 de abril de 2024, las entidades financieras y no financieras europeas enfrentan un momento crítico en cuanto al cumplimiento normativo. El EMIR REFIT representa una revisión sustancial de las normas de reporting de transacciones de derivados, que requiere una preparación meticulosa y una adaptación por parte de los participantes del mercado. Este artículo veremos un examen detallado de los cambios inminentes y sus implicaciones para todas las empresas involucradas en transacciones de derivados.
Antecedentes y Alcance del EMIR REFIT:
El EMIR REFIT, introducido como una actualización obligatoria de EMIR, tiene como objetivo mejorar la armonización y estandarización del reporting de transacciones de derivados en toda la Unión Europea. Implica un cambio significativo en los requisitos de reporting, afectando tanto aspectos técnicos como operativos del cumplimiento. Con la fecha de entrada en vigor acercándose rápidamente, todas las empresas deben asegurar su preparación para cumplir con las nuevas obligaciones, independientemente de si el reporting se realiza internamente o se delega a terceros.
Cambios Clave en las Reglas de Reporte:
La implementación del EMIR REFIT trae consigo tres áreas principales de cambio en las reglas de reporting. En primer lugar, habrá una expansión de los requisitos de datos, aumentando el número de campos reportables de 129 a 203. Esta expansión requiere una revisión exhaustiva de la lógica de reporting, especialmente en campos como «tipo de acción» y «tipo de evento» destinados a mejorar la transparencia de la transacción. Además, se introducirán nuevos campos relacionados con los detalles de la contraparte y la clasificación del producto para solucionar ambigüedades pasadas en el reporte de derivados OTC.
Además, el cumplimiento con el formato XML ISO 20022 se volverá obligatorio para la transmisión de datos a los repositorios de operaciones, con el objetivo de estandarizar los modelos técnicos de reporting. Sin embargo, esta transición puede plantear desafíos para las empresas acostumbradas a los formatos antiguos. Además, un enfoque paso a paso para la implementación requerirá que las posiciones abiertas existentes cumplan con nuevos estándares dentro de los seis meses posteriores a la entrada en vigor, imponiendo requisitos adicionales de reporting en eventos del ciclo de vida posterior a la operación.
Gobierno y Controles:
Dada la importancia crítica del reporting preciso, todas las empresas deben establecer marcos de gobierno y control sólidos para garantizar el cumplimiento con el EMIR REFIT. Particularmente, las entidades que dependen de terceros para el reporting deben ejercer vigilancia en la supervisión de las actividades de reporting para garantizar el cumplimiento con las nuevas pautas. Esto incluye la implementación de mecanismos para monitorear la calidad de los datos, resolver problemas de manera oportuna y comunicarse de manera efectiva con las autoridades reguladoras nacionales.
Impacto del Brexit y Divergencia en los Regímenes de Reporte:
Las implicaciones del Brexit son significativas, llevando a timelines y requisitos divergentes entre los regímenes de EMIR de la UE y el Reino Unido. Con el EMIR del Reino Unido pasando por su revisión, todas las empresas con exposición a ambos mercados deben navegar estas complejidades de manera efectiva. La desalineación temporal entre las fechas de entrada en vigor de la UE-EMIR y el EMIR del Reino Unido REFIT complican aún más los esfuerzos de cumplimiento, lo que requiere una planificación meticulosa y un apoyo continuo para gestionar las complejidades operativas.
Perspectivas Futuras y Preparación para EMIR III:
Mirando hacia adelante, el EMIR REFIT no debe ser visto como un ejercicio independiente, sino como preparación para desarrollos regulatorios posteriores. El inminente EMIR III, actualmente en discusión, traerá cambios operativos adicionales, enfatizando la necesidad de una preparación continua y una adaptabilidad entre las entidades sujetas.
Conclusión:
A medida que se acerca la fecha límite para la implementación del EMIR REFIT, las empresas europeas deben priorizar la preparación para garantizar el cumplimiento con los nuevos requisitos de reporting. Con cambios técnicos y operativos significativos en el horizonte, las medidas proactivas son esenciales para navegar las complejidades de manera efectiva. Además, la vigilancia continua y la preparación para futuros desarrollos regulatorios serán fundamentales para mantener el cumplimiento normativo y la resiliencia operativa en el panorama regulatorio.
Por Francesco di Martino, Consultor del Área de Banca de Common Management Solutions